En Amasea, en el Helesponto, pasión de san Teodoro, soldado, que bajo el emperador Maximiano, por confesar abiertamente su fe cristiana, fue terriblemente azotado, recluido en la cárcel y finalmente quemado vivo. San Gregorio de Nisa cantó las alabanzas de este santo, en uno de sus discursos.
Ver másEn Bizancio, san Acacio (Agacio, Agatio), soldado y mártir (s. IV).
En Constantinopla, san Metrófano, obispo de Bizancio, que consagró al Señor la Nueva Roma.
En Bizancio, san Mocio, presbítero y mártir (s. inc.).
En Paulópolis, ciudad de Brasil, beata Paulina del Corazón de Jesús Agonizante (Amábilis) Wisenteiner, virgen, la cual, habiendo venido de Italia al Brasil siendo aún niña, abrazada la vida religiosa fundó la Congregación de Hermanitas de la Inmaculada Concepción, para atender a enfermos y pobres, a los que, pasando muchos trabajos y penalidades, sirvió con gran humildad y en asidua oración.