Jun 10

Beato Eduardo Poppe

10 de junio Siglo XX

En la ciudad de Moerzeke-les-Termonde, cerca de Gante, en Bélgica, beato Eduardo Poppe, presbítero, que con sus escritos y su predicación propagó por Flandes, en tiempos difíciles, la formación cristiana y la devoción a la Eucaristía.
Nombre
Eduardo (Masculino)
Significado
el guardián de la propiedad, de origen Anglosajón
Celebran
Los Eduardo suelen celebrar el 13-oct:
San Eduardo III el confesor
Otros santos
Otros santos con nombre Eduardo
Nació
18 de diciembre de 1890 en Moerzeke, en el actual Bélgica
Falleció
10 de junio de 1924 en Moerzeke, en el actual Bélgica
Proceso
  • hechovenerable el 30 de junio de 1986 por Juan Pablo II
  • Beatificadoel 3 de octubre de 1999 por Juan Pablo II
Celebración
10 de junio

Vida de Beato Eduardo Poppe

Nació en Moerzeke, Bélgica, en el seno de una familia muy devota. En 1909 ingresa en el seminario de San Nicolás, en Waas, donde se distingue por su gran deseo de "...realizar del modo más perfecto la voluntad de Dios". En septiembre de 1910 es llamado al ejército y ahí inicia sus estudios de filosofía. Al estallar la Primera Guerra Mundial (1914-1918) es reclutado como enfermero, donde da muestras de caridad hasta el grado de enfermar de fatiga. Estando en el ejército recibe la orden sacerdotal en 1916 e inicia su labor pastoral como vicepárroco de la iglesia de santa Coleta (Gante), ubicada en un barrio obrero. Ahí da muestra de ejemplar virtud al atender y socorrer a pobres, marginados, moribundos y niños. Su fortaleza espiritual la adquiere al pasar mucho tiempo ante el Sagrario.

Fue creador de métodos apostólicos de vanguardia; asimismo, promovió asociaciones sacerdotales, de seglares, de renovación litúrgica y de catequesis, entre otras. Forma un Circulo del Catecismo, así como una Liga de Comunión. Confesor y predicador incansable, exclamó, ante la pregunta de un sacerdote al verle frente al altar: "...le estoy haciendo compañía a Nuestro Señor. Me encuentro demasiado cansado para hablarle, así que estoy descansando a su lado".

En 1922 viaja a Leopoldsburgo, donde se responsabiliza de los seminaristas y de los religiosos que realizan el servicio militar. Extenuado, muere debido a los continuos ayunos y penitencias, así como por su ardua labor catequética. Juan Pablo II 1o beatifica el 3 de octubre de 1999, quien afirmó: "...consagró su vida a Cristo en el ministerio sacerdotal. Él se convierte hoy en modelo para los sacerdotes.